La obra del pintor francés Odilon Redon se divide en dos fases: Durante su primera etapa, de color negro, representó los miedos humanos en sombrías pinturas de pesadillas. Más tarde, en su fase colorista, comenzó a representar motivos de la mitología y la naturaleza de forma colorida y abstracta. Las obras del simbolista tienen una urgencia única que lo diferencia claramente de sus contemporáneos.