Lienzos

Producimos todos los lienzos nosotros mismos en nuestra planta de producción de Leipzig, Alemania, en tres pasos:

• Primero imprimimos los motivos sobre grandes rollos de tela de lienzo y recortamos las imágenes con la ayuda de una cortadora de alto rendimiento.
• Nuestros bastidores los montamos con listones de madera con certificado FSC^®. El realizar el montaje nosotros mismos hace posible que podamos combinar medidas desde 20 × 20 cm hasta 120 × 180 cm, con incrementos solo de 10 cm entre cada una de ellas.
• Por último, montamos la tela de lienzo sobre el bastidor de madera y lo fijamos con una grapadora. Para los grandes formatos, este paso es puramente manual y utilizamos puntales intermedios para la estabilización, si es necesario. En el caso de los formatos más pequeños, nuestro equipo utiliza una máquina para estirar el lienzo sobre el bastidor, consiguiendo un ajuste perfecto.

Por supuesto, comprobamos la calidad después de cada paso de producción para que recibas un lienzo de alta calidad y sin defectos.

Nuestra tela de lienzo está fabricada con un tejido de mezcla de algodón y poliéster de 360 g/m², que tiene una estructura textil en relieve similar a la del verdadero lienzo artístico. En interacción con la aplicación del color, la superficie tejida obtiene un aspecto brillante y muy vivo.

Todos los bastidores son de madera de pino y llevan el sello de silvicultura sostenible FSC^®. Nuestras tintas Canon, para la impresión de lienzos, están certificadas para uso residencial y de oficina.

Este material es relativamente ligero. Un lienzo de 100 × 100 cm, por ejemplo, solo pesa unos 2,4 kg. Por lo tanto, colocarlo y moverlo es bastante fácil, especialmente con los soportes de pared que se proporcionan.

Dado que producimos exclusivamente por encargo, solemos necesitar de dos a tres días laborables para la producción del cuadro en nuestro taller de impresión. Una vez listo pasamos a su empaquetado y lo enviamos a tu casa con uno de nuestros proveedores de servicios de envío de confianza.

Los lienzos no deben entrar en contacto con grandes cantidades de agua y no es aconsejable tampoco que las habitaciones donde se cuelguen tengan muchísima humedad, ya que el bastidor de madera y el tejido del lienzo pueden sufrir cambios en sus propiedades. En cambio, si cuelgas el lienzo en un WC o en un pequeño baño de invitados con salida de aire, no debería haber efectos adversos sobre la impresión.

También se puede pasar un paño suave y húmedo sobre el lienzo para limpiarlo ya que esto no dañará la superficie.

Sí, proporcionamos todas las impresiones en lienzo con uno o dos colgadores de pared, dependiendo del tamaño, para que puedas colocar tus impresiones en la pared con el mínimo esfuerzo. Los colgadores dentados se fijan bajo el bastidor de la camilla y se sujetan con seguridad. Para colgar el lienzo en la pared todo lo que necesitas es un clavo para asegurar el montaje. Como los lienzos son relativamente ligeros, normalmente se pueden colgar sin ayuda.

Sí, la sostenibilidad es importante. Para nosotros es necesario saber de dónde proceden nuestros materiales, por lo que adquirimos todos los componentes (desde la tela de lienzo hasta los bastidores de madera y los marcos) de socios responsables y con una larga trayectoria.

La madera de pino de los bastidores, con un procesado CO₂-neutral, procede de bosques europeos y tiene el certificado FSC^®, que representa la silvicultura sostenible. Nuestras tintas UV de Canon, respetuosas con el medio ambiente, tienen la ventaja sobre otras tecnologías de no contener disolventes.

Por lo general, no desperdiciamos ningún material, ya que producimos todas las imágenes bajo demanda, es decir, solo después de que tu hayas realizado el pedido nos ponemos en marcha con la producción de este. Además, reutilizamos las piezas no dañadas de las devoluciones, siempre que es posible.

Puedes eliminar el polvo y la suciedad ligera con un plumero o un paño suave y húmedo. No te preocupes, las impresiones son a prueba de manchas, simplemente no debes frotar demasiado la superficie del lienzo.

Por cierto, los colores son resistentes a la luz y no pierden su luminosidad al quitarles el polvo de vez en cuando.

Te recomendamos que primero sostengas el lienzo frente a la pared para determinar la posición perfecta. También puedes pedir ayuda a alguien para que pueda verlo de forma óptima a 2-3 metros de distancia. Una vez que hayas determinado un lugar en la pared, márcalo con un punto centrado sobre el lienzo. A continuación, mide la distancia entre el borde superior y el colgador dentado (o la abertura con las púas) en la parte posterior del cuadro. Registra esta distancia por debajo de tu primera marca y coloca un clavo en la pared en este punto, y ya estás listo para colgar tu lienzo. Para los formatos grandes, basta con repetir el procedimiento en un segundo punto, y luego en la altura de cada uno de los dos soportes de pared.

Si el bastidor de madera está ligeramente deformado (por ejemplo, debido al transporte o porque la madera, como producto natural, haya sufrido una dilatación por la diferencia del aire o temperatura de la habitación) o no se puede colgar recto, puedes fijar directamente a la pared tu lienzo utilizando un clavo muy pequeño. Para ello, basta con clavar el clavo en la pared con un ligero ángulo a lo largo del borde, de modo que el clavo sujete el borde del lienzo y lo presione ligeramente hacia la pared.