Karoline Kroiss es una pintora realista-figurativa que vive y trabaja en Berlín. La artista contemporánea ilustra a jóvenes desde diferentes ángulos de visión. Sus retratos y perfiles son minimalistas y se mantienen en colores sutiles y apagados. Las representaciones, a menudo melancólicas, se convierten en silenciosas compañeras en sus paredes. En madera o lienzo, las obras despliegan un efecto atractivo y conmovedor.