Las pinturas marinas de la artista kazaja Ludmila Gittel despiertan sentimientos profundamente enterrados. Particularmente impresionantes, son estas obras sobre lienzo o sobre aluminio que al espectador le dan la impresión de ser absorbidas por el paisaje y revelan la belleza, así como la originalidad de la naturaleza y los mares. Inspiradas por Iwan Aiwasowski, las pinturas de Ludmila retratan la inmensidad y la necesidad de libertad.